Fragilidad inocente

Hace unos días, mientras cuidaba un jardín, encontré un pajarillo. Indefenso, aturdido y frágil...Alguien me avisó "es una golondrina"...No entiendo de pájaros así que lo acepté sin más. Cogí a la pequeña golondrina con mis manos y  ni siquiera intentó escapar, me miraba fijamente sin emitir sonido alguno que me pudiera indicar que me temía.
La persona que me advirtió de su presencia se lo llevó y me dijo que lo cuidaría hasta que pudiera volar.
Hoy sé que no era un gorrión sino un Vencejo... 
La curiosidad por los pájaros se ha apoderado de mí.
Pero no sólo ha sido eso sino que percibí cómo la inocencia de la soledad temprana hace que se confíe de cualquier cosa. Los bebés aceptan a cualquiera que los acune y alimente, los acepta, están a merced de quien sea caritativo, bondadoso y generoso en amor.
Una sola mirada de ellos, limpia, transparente hace comunicar la satisfacción y el agradecimiento por el cuidado recibido.... Eso llena el corazón.
Mi homenaje a todos aquellos que dedican sus vidas a cuidar a alguien con esmero y ternura, ya sean personas, ya sean animales.... amor y cariño incondicional que consiste más en entregar que en recibir.
Mi admiración completa hacia ellos.



Comentarios

Entradas populares de este blog

No huyo, solo vuelo

Divertirse en el camino.

Echo de menos tu sonrisa...